Bienvenido a nuestras reviews de proyectores. Te gusta disfrutar de un buen cine en casa, o tienes que hay que hacer que una sala de reuniones proyecte presentaciones como si estuvieramos en un palacio de congresos. ¡Estás en el lugar adecuado! Si quieres saber sobre proyectores nec chile, aquí te traemos cositas ricas!
Revisamos y Añadimos Superventas Constantemente
PROYECTORES LED
PROYECTORES LASER
- Formato
Existen muchas relaciones de aspecto, pero las dos más comunes son 4:3 y 16:9 (panorámico). Aquí la elección del formato es muy sencilla:
16:9 para uso doméstico. El contenido que vayamos a proyector estará en ese formato (películas de cine, videojuegos). La televisión suele estar en formato 4:3. Por eso en las películas observamos las franjas negras arriba y abajo de la imagen.
4:3 para uso profesional. Es es el formato habitual de las pantallas de ordenador y de las diapositivas de presentaciones.
Un proyector con un formato nativo puede proyectar en el otro formato, pero lo que hará será adaptar la imagen. Por eso se recomienda elegir el formato del contenido que vayamos a proyectar de manera mayoritaria.
Os dejamos un vídeo muy gracioso que nos enseña cómo nacieron los formatos panorámico y cinemascope, desarrollados por la industria cinematográfica para distinguirse de la televisión.
- Brillo
Quizá el punto más importante en el que debemos fijarnos, la potencia lumínica. Esta se mide en lúmenes ANSI, una medida estandarizada para comparar el brillo. Y como es evidente, a mayor potencia, mayor precio.
Tened presente que hay diferentes maneras de medir los lúmenes. Los lúmenes led o los pico adoptan diferentes valores. Muchas marcas en sus modelos no indican el brillo en esta medida estandarizada. Uno de los trucos empleados para salir mejor en la foto. Y engañar al consumidor, por qué no decirlo. Así que intentad que siempre venga en lúmenes ANSI para una correcta comparación.
Lo que debemos pensar para elegir el brillo adecuado es el entorno donde se vaya a emplear el proyector, si habrá o no luz ambiente. También algo en la distancia que habrá con la pantalla o la pared, puesto que a mayor distancia se pierde luminosidad. Al igual que en el tamaño de la imagen proyectada, que cuanto mayor sea más brillo pierde. Pero principalmente quedaos con la idea del nivel de luz exterior que entrará o no en la sala para elegir el brillo adecuado. Como norma general podemos decir que:
Para un uso doméstico con las luces apagadas, a partir de 1.000 lúmenes ya empieza a ser exagerado.
Sin embargo, para un uso profesional en salas con luz ambiente, necesitaremos irnos como mínimo a unos 2.500 lúmenes. Y de ahí para arriba. Por eso para un uso profesional los led se suelen quedar cortos.
Por otro lado, aquí nos gustaría resaltar que las lámparas tradicionales, aunque mucho más potentes que los led, con el tiempo sufren un desgaste y pierden en luminosidad. Si alguien ha cambiado alguna vez una lámpara de un proyector seguro que habrá notado la diferencia con la nueva.
PROYECTORES PARA PRESENTACIONES
PROYECTORES PROFESIONALES
Consejo sobre el brillo o luminosidad de un proyector
No es lo mismo el brillo de la luz blanca que el brillo para el color. Los fabricantes nos indicarán el primero, pero no está demás conocer el segundo. Así observamos si la diferencia entre ambos es muy significativa o no.
Para ello, tenemos un recurso muy valioso en esta web: colorlightoutput.
Aunque a veces no encontremos el modelo de proyector que queramos analizar, lo mejor en ese caso es buscar modelos similares de la misma marca. Así veremos si el fabricante tiene mucho desfase entre el brillo de la luz blanca y el brillo de color.
Aquí tenéis un ejemplo de diferentes proyectores que tienen una muy buena potencia lumínica para la luz blanca, pero menos para la luz de color.
No obstante, la más importante es la luminosidad de la luz blanca, sin lugar a dudas.
- Contraste
Lo que mide el contraste es una relación: la diferencia máxima que existe entre el punto más claro y el más oscuro. Una relación 1.000:1 significa que el punto más claro lo es 1.000 veces más que el punto más oscuro. Es importante que este parámetro vaya de la mano del brillo. Si tenemos muchos lúmenes pero el contraste es bajo, la calidad de la imagen se resiente. Dando como resultado una proyección o imagen descolorida porque el impacto de la luz sobre la pantalla repercute en la intensidad del negro.
Cuanto más elevado sea este valor, mejor pureza de los blancos y los negros. Y mayor nitidez en la imagen proyectada. Es importante recalcar que existen dos tipos de contraste:
Contraste nativo vs dinámico
Contraste nativo: también llamado estático, es la relación que se obtiene al dividir el blanco y el negro máximos. Vamos el que acabamos de explicar.
Contraste dinámico: también llamado contraste on/off, incorpora la variable tiempo. Muchos proyectores incorporan un iris motorizado que permite modular la entrada de luz. De tal manera que en escenas muy luminosas se abre, y en escenas oscuras se cierra. Esto permite calcular la relación de contraste en momentos diferentes, dando como resultado números estratosféricos.
Por tanto, no os dejéis sucumbir ante el ratio de contraste dinámico. Los fabricantes son muy pillos y tienden a ocultar el contraste estático o típico (otra forma de llamarlo), en aras de abultar la cifra.
En cuanto a sus valores, aunque dicen que el mínimo debe ser de 1.000:1, es a partir de 2.000:1 cuando no deberíamos tener pega alguna. Ahora bien, a partir de una resolución 5.000:1 ya hablamos de otra cosa. Se puede llegar incluso a resoluciones mayores de 15.000:1, pero eso ya es jugar en la Champions League.
Y para el contraste dinámico, podremos ver tranquilamente valores desde 25.000:1 hasta incluso de 150.000:1. Cuanto mayor sea mucho mejor. Pero no confundáis los términos, que es lo que pretenden conseguir las marcas.
- Resolución
La resolución nos indica el número de pixeles que muestra por alto y ancho. Por tanto, la calidad de la imagen y el tamaño máximo en el que podremos proyectar sin que veamos imágenes pixeladas.
Hemos de tener en cuenta que para altas resoluciones, y más todavía si la distancia del proyector es elevada, debemos acompañarla de un alto nivel de brillo en lúmenes. Si tenemos un proyector Full HD pero la potencia lumínica es más bien baja, disfrutaremos menos de la alta calidad de imagen porque apenas se iluminará.
Tipos comunes de resolución
Formato 4:3 cuadrado
Cuatro tercios por distinguirlo, porque en realidad también es un rectángulo.
SVGA 800×600: la más habitual con un ancho máximo recomendable de 160 cm. Ideal para presentaciones en aulas o salas de reuniones.
XGA 1.024×768: ampliando el ancho máximo de pantalla a 220 cm. Recomendable cuando necesitamos ampliar el ancho de pantalla en salas más grandes con una mayor audiencia.
Formato 16:9 panorámico
HD 1.280×720: es la resolución más habitual, que normalmente utilizan los canales de televisión o las películas en DVD. Su ancho máximo de pantalla recomendado puede irse hasta los 240 cm.
WXGA 1.366×768: utilizada en las tarjetas gráficas de los ordenadores, por lo que un proyector con esta resolución puede ser muy útil en entornos profesionales donde se quiera una réplica exacta de la pantalla del pc.
HDTV 1.920×1.080: la famosa resolución Full HD o HD ready. Es la resolución que utilizan los reproductores de bluray, videoconsolas de alta definición o algún canal de televisión de pago. Aquí el ancho máximo de la proyección ya nos permite irnos a más de los 240 cm. Podréis ver que se distingue entre 1.080p y 1.080i, ofreciendo mejores resultados la “p” al ser proyección progresiva frente a la “i” que es entrelazada.
UHDV 3.840×2.160: del formato 16:9, no es que sea de las más habituales, pero cada vez se está implantando más en el mercado con pecios más competitivos. Esta resolución hace las delicias de los más exigentes, y se la conoce también como resolución 4k o ultra HD. Básicamente lo que ha conseguido es multiplicar por dos la resolución full HD en ambas dimensiones, la vertical y la horizontal, de ahí que se llame 4k.
Resolución nativa
Algo muy importante en lo que debemos fijarnos es en la “resolución nativa“, y no caer en el truco de la resolución máxima que nos ofrecerá el fabricante. De esta manera conoceremos la resolución óptima para la que se ha diseñado el proyector. Que aunque acepte otras, será en ésta donde nos ofrezca los mejores resultados.
De momento la resolución es quizá la prestación que más encarece el producto, pero si eres un fanático de la máxima resolución, te recomiendo que eches un vistazo a este listado con una selección de proyectores 4k baratos.
LOS MEJORES PROYECTORES HD
MEJORES PROYECTORES FULL HD
PROYECTORES 4K BARATOS
- Tamaño máximo de pantalla y distancia de la proyección
Para conocer el tamaño de la imagen proyectada debemos recurrir al famoso “throw ratio“. O en español que nos entendemos mejor, el factor de proyección. Éste mide la relación existente entre la distancia y el ancho de la pantalla. También se le llama comúnmente el tipo de tiro que tiene:
Proyector de tiro normal: para colocarlos a cierta distancia. Normalmente pensados para ser colgados del techo. Un factor muy habitual es de 3:1. Esto es, que si colocamos el proyector a 3 metros de la pantalla, ésta tendrá un ancho de un metro.
Proyector de tiro corto: o ultra corto. Estos dispositivos están pensados para colocarse cerca de la pantalla sin ninguna fijación. Por ejemplo, un factor de 0,5:1 nos dirá que colocando el aparato a medio metro de distancia, la pantalla será de un metro de ancho.
Esto es algo crucial para obtener los mejores resultados. Pero que no debería preocuparnos en exceso por varios motivos:
Los fabricantes siempre ponen a nuestra disposición calculadoras de tamaño y distancia para sus diferentes modelos. Aquí el ejemplo de Benq. Por cierto, “throw distance” es la distancia del proyector con la pantalla, lo que llaman el tiro del proyector. E “image diagonal” son las pulgadas de la pantalla. Por si os pilla en inglés.
Con el zoom ajustamos el enfoque de la imagen al tamaño de nuestra pantalla.
Muchos proyectores cuentan con una función llamada “keystone“, que nos corrige el tamaño y el enfoque.
Y si no contamos con esta función o no queremos tocar el zoom… ¡paciencia!, seguro que haciendo varias pruebas dentro del espacio del que dispongamos en la sala damos con la distancia y el tamaño ideales.